Adrián, un pequeño peregrino interesado por los temas Jacobeos

por Antonio Gavilanes

Hace unos días recibí en el albergue la visita concertada de un pequeño peregrino. Se trata de Adrián, estudiante en el CEIP “Pedro I” de Tordesillas. Se encuentra en el  6º curso de Primaria y su profesor del área de religión, Alberto, peregrino y hospitalero en el albergue municipal de Tordesillas, le ha encomendado a él y al resto de compañeros un trabajo relacionado con el Camino de Santiago. Ni corto ni perezoso pensó que la mejor forma de conocer cosas sobre el mundo jacobeo era hablar con alguien que en la práctica viva y esté al día de lo que acontece entre peregrinos, y para ello se vino al albergue. La entrevista, muy bien planteada e hilvanada, la grabó íntegramente en video. Posteriormente elaborará un montaje audiovisual para entregarlo en el “cole”.

Es ciertamente sorprendente que a esa temprana edad un alumno de 6º de Primaria se ”enfrente” a un hospitalero con una batería de preguntas que más bien parecían de un profesional de los medios de comunicación. Hicimos un breve recorrido desde los inicios de las peregrinaciones, pasando por los caminos más solicitados por los peregrinos,  el funcionamiento y el día a día de un albergue, la relación del albergue con la localidad, el Camino del Sureste como ruta que pasa por Tordesillas y alguna otra que solicitaba mi  opinión personal. Todas tuvieron cumplida respuesta por el entrevistado.

Finalizamos la visita con un recorrido por las instalaciones del albergue recibiendo material impreso del que se dispone en la estantería de la recepción y que seguro le servirá para completar su proyecto iniciado una tarde primaveral en el albergue de peregrinos situado en la Calleja del Corpus.

Aproveché el momento para animarle a que en un futuro cercano convenza a sus padres para realizar algún tramo de las muchas rutas que existen esparcidas por el territorio nacional y a poder ser que elijan el que discurre por nuestra localidad, es decir, el Camino del Sureste, partiendo desde su propia casa como lo hacían los peregrinos de otras épocas.

Adrián, seguro que esta experiencia te dará buenos frutos y espero que no sea la última vez que te acerques por este lugar donde se practica la hospitalidad sin recibir nada a cambio. Esa es la labor de los hospitaleros voluntarios. Y en Tordesillas hay cuatro vecinos que practican esa labor de acogida.

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