Un año más, y con este se cumple el 25 aniversario, el grupo de Coros y Danzas “Besana” de Valladolid organizó la noche de las MARZAS. En ella se rememoran las coplas que se entonaban a media noche, el momento en que nace la vida, que comienza con los primeros brotes de la primavera. De ahí nacería la costumbre de celebrar el inicio del año en los últimos días de Febrero o primeros de Marzo, reuniéndose las gentes de nuestros pueblos y ciudades en la Plaza Mayor, con el fin de cantar las viejísimas coplas marceras frente al edificio del Ayuntamiento y contando con la preceptiva compañía de una hoguera
En esta ocasión, debido a las inclemencias atmosféricas, se trasladó a la Cúpula del Milenio. Doce agrupaciones de Danzas y cuatro de Dulzaineros participaron de forma activa en el evento, entre ellos los grupos tordesillanos “Juana I de Castilla” y “El Corro”.
El acto comenzó con la entrada y la recepción de danzantes y tocadores entre los aplausos del numeroso público asistente que sirvieron para entonar un poco el ambiente ante la baja temperatura que había en la cúpula. En el centro del escenario y presidiendo el acto se colocaron las ramas y flores del Marzandrón que es “un monumento floral en torno al que se celebraba la fiesta y que simboliza la floración o alumbramiento de la vida”.
Tras una breve explicación por parte de la presentadora dio comienzo el acto en sí con los doce toques de un cuerno, rematado con un “feliz año nuevo” gritado por todos los asistentes. A continuación se entonó el primer canto marcero que pudieron seguir a través de un cuadernillo distribuido entre la gente en el que figuraban todas la coplas.
Estas fueron las agrupaciones participantes: Besana, Mies y Barro, La Esgueva, De Geria, La Trébede, Ribera de Pisuerga, La Estepa Castellana, Pisuerga-Huerta del Rey, Pilarica A.F., La Victoria, El Corro, Juana I de Castilla, Dulzaineros Espadaña, Campos de Mielgas, Escuela Pilarica y Villaolid.
Al son de la dulzaina y la caja siete fueron las piezas interpretadas en grupos de tres y de dos, a excepción de la “jota de los novillos” que puso en escena el “Juana I de Castilla”.
En cuanto a los grupos tordesillanos, “El Corro” bailó “Vallisoletana” y “San Roque”. Por parte del “Juana I de Castilla” lo hizo con “Los Cántaros”.
Como final del encuentro, ocho grupos, entre ellos el “Juana I de Castilla”, bailaron al unísono la pieza del “Encadenado” o “Baile de las Marzas” originaria de la zona de Boada de Roa (Burgos).
La organización ofreció como colofón una sabrosa degustación de sopas de ajo para el público en general.
