Cuarenta y cinco años han pasado desde que los hermanos Luis y Tomás Miguel Morales, se establecieran en Tordesillas abriendo una pollería en el número 2 de la Carretera de Matilla.
Eso fue el 3 de marzo de 1979, pero la historia comienza mucho más atrás. Estos muchachos, en el año 1965, emigraron en busca de un trabajo digno al País Vasco y siendo como eran trabajadores, no tardaron en buscar empleo que les proporcionase una vida con perspectivas de futuro y sus sueños se fueron realizando, de tal manera que en los 14 años que allí estuvieron, consiguieron reunir los ahorros suficientes que les permitieran volver al pueblo y montar su propio negocio.
No tardaron en hacerse con un buen montón de clientes, que no dejaban de crecer, gracias, entre otras cosas, al buen servicio y a su apuesta firme por la calidad de sus productos.
Su afán emprendedor, les llevó a poner en marcha otro negocio, que dio como resultado abrir un bar que bautizaron “Los Castillos” que se ubicaba en la esquina de la calle que lleva su nombre.
El bar funcionó bastantes años, hasta que decidieron traspasarlo, posiblemente por inclinarse más los hijos por la tienda que por el bar.
Llegado este momento hicieron la primera reforma de la tienda, adecuándola y modernizándola con arreglo a los nuevos tiempos, además de ampliar su oferta y servicio a los clientes que a pesar de los recién instalados supermercados en la villa, no sintieron su competencia, sino, todo lo contrario. ¡El local se les quedaba pequeño!
Así que hemos llegado al año 2024 y Alimentación Tomás y Ángela, que es como se llamaba últimamente la tienda al tomar el relevo los hijos y convertirla en sociedad, para pasar a llamarse “Alimentación Morales”, aprovechando su ampliación y duplicando su espacio, con la adquisición del local contiguo que ocupaba Fontanería Díez Serna, que a su vez se desplazó a la Avda. Valladolid.
No nos queda más que felicitar a esta familia de emprendedores y que sigan beneficiándose de la suerte que proporciona el trabajo.
¡Enhorabuena y a disfrutarlo!
