Quiero traer a la memoria algunos acontecimientos históricos ocurridos en nuestro país para agradecérselo a las personas que han sido protagonistas de ellos.
Con esto quiero contribuir, aunque sea con un granito de arena, a cambiar la leyenda negra que algunos escritores se empeñan en dar.
Hace pocas semanas en el teatro Zorrilla de Valladolid, se recreó en verso la obra “Magallanes Elcano”. Armando Jerez es el coprotagonista y autor del texto. Cuenta que se le ocurrió la idea de escribir la obra tras descubrir la magnitud de la gesta en dos exposiciones celebradas en el Museo Naval de Madrid y el Archivo de Indias de Sevilla, ciudad de la que partió la expedición.”Me pareció una aventura alucinante y sin parangón, que yo apenas conocía, y me planteé una obra que pudiera ayudar a darla a conocer”. “Siempre he concebido el teatro como un arma que ayude a la educación”.

Para ello se apoyó en la historiografía existente con el fin de recrear aquella expedición con fidelidad y rigor. Late en el proyecto un afán también de reivindicar aquellos aspectos de la historia de España que son dignos de admiración.
“Somos un país de complejos. Tenemos una historia fascinante, con sus luces y sus sombras, como todo el mundo, pero nosotros estamos empeñados en ocultar nuestras luces y agrandar las sombras.”
“Si Magallanes y el Cano fueran ingleses, habría veinte películas de su gesta.”
Otro tema que pesa sobre la leyenda negra de España, es el tema del descubrimiento de América.
Precisamente en el mes de febrero de este año venia en la prensa en la sección de Cultura dos fotografías: una del indio apache llamado Gerónimo del 1887, y la otra del descendiente directo del líder apache, llamado Alfonso Borrego.
Esta persona desmiente la leyenda negra sobre los españoles. El cuenta que aprendió desde pequeño en la escuela y en su familia asentada en la región de El Paso (Texas EE UU) que los españoles habían venido un día y habían arrasado con todo y matando a todos los hombres, mujeres y niños de su tierra. ”Las tribus te dicen que los españoles cometieron muchas atrocidades y lo robaron todo, pero no tienen nada escrito, nada consistente, simplemente es una historia que está en la tradición oral y así se cuenta generación tras generación. Y la gente no piensa, no se hace preguntas solo repite lo que ha oído”. Afirma en una entrevista con ABC.


Que su famoso ancestro hablara perfectamente en español o el descubrir que las reservas indias, último reducto de los nativos americanos en EEUU, siguen estando ubicadas hoy en estados con nombre de origen español le dio las primeras pistas a Borrego para descubrir una historia diferente a la que le habían contado.
“Los estadounidenses llegaron barriendo a todos los indios desde el Este. Igual que Custer, que tiene un montón de películas y homenajes. Los indios se fueron moviendo, mientras los iban persiguiendo hasta que quedaron en reservas.
Esa es la realidad, pero la gente no cambia el foco, porque desde pequeño les han contado que los españoles mataron a todos sus antepasados.”

Alfonso Borrego, es presidente de la Asociación Cultural Heritage Society del Camino Real de Tierra Adentro. Y comenta: <<Ahora hay gente aquí hablando de que los españoles deben pedir perdón .¿Pero de que estás hablando? Da tu gracias porque te dejaron todos los edificios, la lengua, la tecnología, alimentos y animales que en América no se conocían, todo hecho>>.
“Cuando los españoles llegaron aquí se mestizaron con los indígenas. Son dos culturas combinándose y creando cosas. Eso para mí es una cosa maravillosa y bonita” proclama.
Leyendo la historia de este personaje, que cuenta como se fraguo la leyenda negra de España, pienso en nuestra juventud leyendo la memoria histórica que le están ofreciendo. Muchos pueden acabar confundiéndola. Pero ¡ojala! sean muchos los que investiguen como este señor para conocer la verdadera historia de España.
Humor: Le dice un indio a Colón, cuando llega a América. ¡Hola, Colón! ¿Cómo me has conocido? Por la “Pinta”.
El dentista le consulta a su paciente: ¿Le pongo anestesia local? No póngamela importada. Yo puedo pagarla.