Cada 20 de noviembre se celebra el Día de los Derechos del Niño, una fecha que nos recuerda la obligación de proteger, promover y garantizar el desarrollo integral, el bienestar y la seguridad de todos los niños y niñas. Desde 1989, con la adopción de la Convención sobre los Derechos del Niño por parte de las Naciones Unidas, estos derechos se han convertido en el estándar internacional para asegurar que cada menor pueda vivir en condiciones dignas y plenas. Entre estos derechos destacan el acceso a la igualdad y no discriminación; la protección de su identidad y nacionalidad; el derecho a una vida saludable, al desarrollo pleno, a la educación, al juego y al descanso; a expresar sus opiniones; a un entorno familiar seguro; y a ser resguardados del maltrato, el abuso y el trabajo infantil.
No obstante, para muchos niños en el mundo, estos derechos siguen siendo una promesa lejana. El Mercadillo Solidario organizado por el Colegio Divina Providencia de Tordesillas pretende concienciar sobre esta realidad, además de mostrar el trabajo de nuestros alumnos en proyectos educativos que fomentan la colaboración y el aprendizaje activo. La exposición recoge el esfuerzo de los alumnos de 3º de Primaria durante el pasado curso escolar, quienes trabajaron distintas disciplinas de manera integrada: presentaron sus aprendizajes en Lengua a otros compañeros, aplicaron conceptos matemáticos al gestionar el mercadillo y crearon obras artísticas en Plástica. La culminación de su labor permitió recaudar más de 500 euros destinados a apoyar comunidades en Sierra Leona.
El profesor Iván Morales, parte de nuestro colegio y voluntario en la misión, vivió de primera mano la situación de Kamalo y Kamabai, dos comunidades donde la precariedad es la norma. Las imágenes que acompañan la exposición revelan un entorno en el que el acceso a la sanidad es inexistente, el agua potable depende de pozos defectuosos y la alimentación escasea, reduciéndose a una comida diaria. Los niños suelen caminar descalzos o con calzado deteriorado, y juegan con juguetes hechos de materiales reciclados. Estas condiciones demandan una acción urgente para garantizar sus derechos más básicos.
El mercadillo fue mucho más que un proyecto escolar; simbolizó el compromiso de nuestros alumnos por transformar la realidad de otros niños, mejorando su acceso a la educación y su calidad de vida en la escuela agustiniana de Kamabai.